¿Te sientes triste a veces sin saber por qué?
Si es así, no te preocupes, no eres la única persona que lidia con pensamientos negativos o situaciones difíciles. Por eso no te apresures a pensar que algo anda mal en ti.
Lo cierto es que todos nos ponemos tristes de vez en cuando sin necesidad de tener que estar pasando por problemas o por haber tenido alguna experiencia traumática en el pasado.
Puede ser que algunos al observarnos crean que estamos bien, pero la realidad es que solemos tratar de ocultar nuestra tristeza, quizás inventando alguna excusa para no preocupar demasiado a los demás.
Independiente de cuál sea el motivo de tu tristeza – incluso aún cuando parezca que no hay ningún motivo – si crees que has llegado a tu tope, vale la pena buscar ayuda.
¿Qué puedes hacer cuando te sientes superado por la tristeza?
Las siguientes sugerencias puede ser de útiles:
HABLA CON ALGUIEN
Un proverbio dice: “El verdadero amigo ama en todo momento y es un hermano en tiempo de angustia”
Estas palabras hacen ver que, hablar con alguien de cómo te sientes y saber que te entiende es todo un alivio.
Al hablar con alguien es como si te arrojaran una cuerda para ayudarte a salir del “hoyo de la tristeza” en el que estabas atrapado.
Con esfuerzo y la ayuda de otras personas que te quieren puedes salir victorioso.
PONLO POR ESCRITO
Normalmente la tristeza no te permite pensar con claridad.
Es por eso, que, siempre se ha dicho que cuando uno esté triste, no se apresure a tomar decisiones importantes, pues probablemente se equivoque.
Por lo tanto, poner por escrito tus sentimientos puede ayudarte a organizar esa “maraña de pensamientos” que te invade cuando estás triste.
De ese modo, aclararás tu mente y permitirás que tu capacidad de pensar te ayude a decirte acertadamente y sentirte mejor.
A modo de sugerencia: hay quienes acostumbran a tener disponible un cuaderno donde escribir sus sentimientos y las razones – si las supieran – por las que se sienten así. Al cabo de un mes, vuelven a leer lo que escribieron y si entonces se sienten mejor pueden anotar qué fue lo que les ayudó.
EL PODER DE LA ORACIÓN Y LA BIBLIA
No son pocas las personas creyentes que encuentran en la oración a Dios una gran ayuda.
Por ejemplo, una joven llamada Esther dijo: “Aunque trataba de entender por qué me sentía tan desanimada, no lo lograba. Le pedí a Dios que me ayudara a ser feliz. Estaba cansada de sentirme tan mal sin razón, pero por fin superé esos sentimientos. Uno nunca debe menospreciar el poder de la oración”
Para muchos otros, llenar su mente de ideas positivas extraídas de algunas porciones de la Biblia les ayuda a tener un buen efecto en lo que piensan, sienten y hacen.
Un buen ejemplo de ello son las palabras consoladoras del Salmo 34:18, que dicen: “Jehová está cerca de los que tienen un corazón destrozado; salva a los que están hundidos en el desánimo” (Traducción del Nuevo Mundo)
Sin embargo, a pesar de que muchos tratan de poner en practica estas sugerencias, la realidad es que a veces la tristeza no desaparece.
Por ejemplo, un joven llamado Raúl dice: “Algunas mañanas pienso que sería más fácil quedarme en la cama para no tener que enfrentarme a otro día sin sentido”
Si estos sentimientos de tristeza se alargan en el tiempo o empeoran, no sientas vergüenza en pedir ayuda a un profesional.
Un doctor tal vez pueda ayudarte a determinar si tu tristeza se debe a una depresión y si ese fuera el caso, por favor, mantén la calma.
Aunque es un asunto personal, muchos de los que padecen esta enfermedad llegan a sentirse mejor y recuperarse al recibir un tratamiento médico adecuado.
Deseamos que estas sugerencias te ayuden ver el presente y el futuro de manera más positiva.
Te animamos a que no te pierdas el próximo artículo de ÁNIMO PARA LLEVAR, el cual hablará de la importancia de lograr una buena reputación ante los demás, con el título:
“UN BUEN NOMBRE”
Mientras tanto, aprovechamos para mandaros un cordial saludo junto con nuestros mejores deseos.